NOTICIA: ¿Qué puntos debe contener el presupuesto de una reforma integral?.
La especificación detallada de cada uno de los trabajos, el precio de la mano de obra y de los materiales, así como una descripción de los mismos y de las calidades, son los apartados que no deben faltar en un presupuesto de reforma, junto con los datos completos de la empresa.
Aceptar un presupuesto de reforma integral es una decisión de importancia, tanto por la inversión que supone una obra de este tipo como porque de la empresa elegida y las condiciones acordadas va a depender su resultado. Antes de comenzar una reforma es necesario comprobar que el presupuesto incluye toda la información necesaria, tanto la relativa a los trabajos que se van a realizar, los materiales necesarios o los datos de la empresa.
Una vez firmado, el presupuesto de la reforma es vinculante, por lo que es imprescindible comprobar que en el documento aparecen tanto los datos de la empresa (nombre, CIF, dirección y contacto) como los de la persona que va a contratar la reforma y los de la vivienda a reformar.
Además, antes de detallar los trabajos concretos que se van a realizar, es habitual que el presupuesto incluya una breve descripción de la reforma en sí. Lo que no siempre se indica -pero es recomendable- es la fecha de finalización de la reforma. Aunque en este tipo de trabajos puede no ser exacta, dará al propietario de la casa una previsión aproximada de cuándo podrá disponer de ella.
Ferran Font, portavoz de pisos.com nos indica la importancia de prestar especial atención a la información detallada en el presupuesto definitivo de la reforma integral debido a que las reclamaciones a realizar solo se tendrían en consideración si están estipuladas de forma escrita.
La parte central del presupuesto es la descripción de cada tipo de trabajo, que debe aparecer desglosado en diferentes apartados, principalmente:
Fontanería. En esta partida deberá incluir la instalación de tuberías y desagües, los puntos de consumo, el lavabo, inodoro y resto de instalaciones del baño, así como la instalación del termo o calentador y, en su caso, del mueble de baño y la mampara.
Electricidad. Del mismo modo, en el apartado dedicado a la electricidad se deberán indicar todos los trabajos como si se va a cambiar la instalación eléctrica, las cajas, puntos de luz y demás mecanismos.
Calefacción. Deberán indicarse de forma detallada el sistema de calefacción que se va a instalar y los materiales necesarios.
Albañilería. El presupuesto deberá incluir los trabajos de albañilería tales como si se van a instalar nuevos tabiques, falsos techos o suelos; alicatados y revestimientos, etc., junto con los materiales que se van a emplear.
Carpintería interior y exterior. Esta partida incluye desde la colocación de puertas o el revestimiento de armarios a las ventanas, cerramientos o persianas, con el detalle de los materiales.
Mobiliario de cocina. Si la reforma incluye también la instalación de los muebles de la cocina, el presupuesto deberá especificar la descripción y calidades de los muebles y encimera, así como su número y disposición en un plano.
Pintura. Por último, en el apartado dedicado a la pintura se deberán indicar los espacios en los que se va a trabajar, los metros cuadrados que se pintarán y los materiales.
Los materiales, detallados
Además de los trabajos de la reforma, el presupuesto deberá incluir los metros cuadrados de las estancias que se van a rehabilitar, el precio por metro cuadrado (cuando sea posible) y el total de la mano de obra de cada trabajo, así como la descripción detallada de los materiales.
Tanto es así que es aconsejable que el presupuesto lleve anexa una memoria de materiales y calidades, ya que se trata de uno de los aspectos en los que más fácilmente pueden surgir conflictos. Este detalle deberá incluir todos los materiales que se van a emplear en la reforma y los elementos que se van a instalar con la mayor descripción posible y una especificación, al menos aproximada, de las calidades.
Esto incluye la especificación de los elementos que se van a instalar en el baño, con marca y modelo; descripción de los muebles de cocina y baño; los materiales empleados en las conducciones de fontanería; los azulejos y revestimientos, con precio por metro cuadrado y calidad, etcétera.
Otros gastos a tener en cuenta
No hay que perder de vista que además de los trabajos específicos de que consta la reforma existe otra serie de partidas que pueden aumentar el importe del presupuesto, que también deben especificarse.
Cuando la reforma exige contar con una licencia de obras, es habitual que haya que acompañar la solicitud de un proyecto técnico. Además, el presupuesto tendrá que especificar el coste de las demoliciones y desescombro: retirada de tabiques, suelos, puertas, muebles, sanitarios o cualquier otro elemento, a lo que hay que sumar el coste de los contenedores y el transporte.
Junto a los apartados anteriores, deberán aparecer en el presupuesto el precio sin IVA y con IVA, y también la garantía con qué cuenta cada uno de los trabajos.
